viernes, 13 de marzo de 2009

Conservación de los recuerdos...

Cortázar: qué paso? Mejor… qué pasa si no soy ni cronopio ni fama? Me explico… yo procedo todas la noches a etiquetar mis recuerdos… pero no con pelos y señales, los etiqueto con sonidos de bajos, tambores y guitarras. No los cuelgo en los muros con letreros de “excursión a Quilmes” o “Frank Sinatra”… los dejo que reposen donde mejor queden o quieran, para que al sonar de nuevo esos sonidos, ellos, mis recuerdos, puedan volar por todo el espacio y estremecer mis entrañas con los acordes y en ellos… cada ínfima molécula de mi recuerdo y sentimiento…

Como veras amigo Cortázar, no embalsamo mis recuerdos, pero si los organizo y de alguna extraña forma los etiqueto… lo que me convierte en una fama… pero igual los dejo correr por el espacio cada vez que quieren… así me sorprenden y alegran la vida… lo que en cierta forma me transforma en una especie de cronopio…

jueves, 5 de marzo de 2009

rumbo

Ayer encontré bajo mis uñas un hombre colgado… efecto del día y su pasar por mí.

En mi cabeza un disparo de escopeta que persigue mis pensamientos para darles su fin.

Y en mi mano tu rastro... Vacío... colérico... que me recuerda por que llegue aquí.

lunes, 2 de marzo de 2009

la luna

Soñar… que lindo, es hacer las cosas persiguiendo un sueño, aunque sea por solo unos segundos, hacer las cosas por la pasión del instante, así todo se pierda al segundo siguiente, solo en esas apuestas perdemos la capacidad de arrepentirnos después… pues todo lo luchamos con la pasión… con la necesidad y el convencimiento de hacer lo correcto en ese segundo.

Es como construir con barriles desechos y la ayuda de todos los hermanos, un cohete, uniendo con soldadura mal hecha cada uno de los bordes, dejando espacio para la dinamita en el fondo, en el medio espacio para la comida y al final el lugar para los viajeros. Además de por supuesto acomodar un espacio en la casa para el despegue, sin importar cuantas personas del pueblo se burlen por nuestro intento de seguir los pasos de otros. Sin importar cuantas veces nuestras manos se corten en el proceso… Para finalmente en el mes de julio, prender la mecha corta y viajar en búsqueda de ser el segundo grupo de hombres en alcanzar la luna.

No importa que minutos después del despegue nuestro cohete se destruya contra la colina vecina… y salgamos con quemaduras en el cuerpo… no importa que el pueblo se burle, pues siempre en el fondo sostendremos que la luna solo se escapo de nuestros pasos por unos cuantos metros… es cuestión de poner más dinamita en el próximo lanzamiento.

...

La hoja en blanco… mi nueva amiga, vacía, fría, limpia, tranquila, perturbante…  ya vale mierda… te la regalo, llénala con lo que quieras, no soy nadie para postular palabras, ni frases ni ideas… llénala con lo que quieras… mi nueva amiga solo quiere ser el espacio de ellas… tus palabras… las mías… dejaron de existir.